Conocer los diversos efectos que puede tener el
divorcio en los niños puede ayudarte a manejar la situación de un modo que sea
más fácil para ellos.
LOS PRINCIPALES EFECTOS:
Miedo al
cambio. Los niños se enfrentan a una situación incierta, no saben si
deberán ir a vivir a otro sitio, si perderán el contacto con ciertos miembros
de su familia, amigos, o con alguno de sus padres o qué otras cosas pueden
cambiar en sus vidas. Si hablas con ellos y les explicas los cambios que
tendrán lugar les resultará menos estresante.
Miedo a ser
abandonado. Los niños temen que si pierden un padre pueden perder también
el otro. Pensar que pueden estar solos en el mundo es algo que asusta mucho a
los niños.
Miedo a
perder a otras personas. Pueden tener miedo de perder también a otras
personas a quienes quieren, como abuelos, amigos, hermanos, o incluso mascotas.
Los niños pueden estar también muy apegados al lugar en el que viven y la idea
(real o imaginada) de tener que marcharse les crea ansiedad.
La tensión
entre los padres. El nivel de tensión entre los padres aumenta bastante
durante el divorcio y cuando éste es reciente; los niños pueden percibir esa
tensión. Si además, los padres tratan de hacer que los hijos se vuelvan en
contra del otro progenitor, estarán creando un gran estrés en ellos.
SIGNOS QUE INDICAN QUE LOS NIÑOS NO ESTÁN
AFRONTANDO BIEN EL DIVORCIO
1.
Agresividad y desafío. Los niños pueden estar más enfadados y reacios a
cooperar de lo que suele ser habitual en ellos.
2. Intentar
unir de nuevo a sus padres. Algunos niños piensan que de algún modo tienen
la culpa de la ruptura. Estos niños pueden mostrarse rebeldes y portarse mal o
bien tratar de portarse muy bien porque creen que así sus padres no se
divorciarán.
3. Depresión
y retirada. Pueden reaccionar con depresión, con deseos de estar solos,
trastornos alimenticios, discusiones e irritabilidad o amenazas de suicidio.
PARA REDUCIR ESTOS EFECTOS:
1. Hablar con
los hijos y explicarles que seguirán teniendo a ambos padres, que los dos
los seguirán queriendo igual y explicarles lo que va a pasar, los cambios que
deberán afrontar y que todo va a ir bien.
2. Tratarse
con respeto. Los niños afrontan mucho mejor el divorcio cuando sus padres
se tratan con respeto y tienen una actitud amable y cooperadora entre ellos.
Incluso aunque estén enfadados o resentidos. Comportarse de manera civilizada
entre los adultos ayuda a la estabilidad emocional del menor.
3. Seguir la
rutina habitual. Los niños se sienten más seguros cuando existe una rutina
en sus vidas. Por lo tanto, continúa con la rutina habitual, manteniendo los
mismos horarios, tareas, etc.
***Existen ciertas señales que nos
indican que necesitamos ayuda, esto es cuando se presentan manifestaciones que
son intensas o tiene demasiada permanencia en el tiempo, afectando a la calidad
de vida personal y de su núcleo familiar, siendo conveniente consultar a un
especialista***
Fuente: http://www.cepvi.com/index.php/psicologia-infantil/articulos/el-efecto-del-divorcio-en-los-ninos
PSICOLOGÍA INFANTIL Y ADOLESCENCA